SANTO DOMINGO. La representación dominicana en el béisbol organizado norteamericano no solamente ha ganado titulares en los últimos años por asistir a Partidos de Estrellas, ganar premios Cy Youg, de Jugador Más Valioso o Novato del Año.
La acentuada presencia criolla en el escándalo de los esteroides, en trifulcas dentro y fuera del terreno, prisión por conducir bajo los efectos del alcohol, insistentes demandas de cambios de equipos y la renuencia a cambiar de posición, se vienen a unir a la vieja y escandalosa práctica de alteración de documentos, previo a la firma para el profesionalismo.
El último capítulo de esta "novela" fue el que protagonizaron el pasado jueves José Guillén y Pedro Martínez, quienes estuvieron a punto de enfrentarse a los puños, cuando este último golpeó por quinta vez en 42 turnos que ha enfrentado al jardinero de los Nacionales.
La guerra de palabras de uno y otro a través de los medios ha encendido la chispa de cara al inicio esta noche de una serie entre Mets-Washington, lo que movió a Major League Baseball (MLB) a advertir a los jugadores de que bajen el tono. La primera serie entre ambos equipos estuvo matizada por los pelotazos, lo que provocó que Félix Rodríguez fuera suspendido por tres juegos.
Julián Tavárez cumple una suspensión por 10 días luego de escenificar una pelea con Joey Gathright, al final de la pretemporada. Franklin Francisco, una promesa del relevo, es más conocido por el incidente que protagonizó en 2004 (cuando cortó una señora en las tribunas con una butaca que lanzó en medio de un pleito) que por el gran potencial que posee en su brazo.
Además de que Sammy Sosa tuvo que comparecer ante el Congreso por las acusaciones que le hiciera José Canseco, quien atribuyó el éxito del criollo al uso de esteroides, el petromacorisano figura en una lista de jugadores que serán investigadoas en los próximos meses por una comisión designada por MLB.
Más de una docena de peloteros dominicanos fueron suspendidos el año pasado por haber dado positivo en la prueba de dopaje.
Decenas de jugadores criollos han sido detenidos manejando en estado de ebriedad o violando los límites de determinados estados y algunos incluso han llegado tarde a los partidos. Por este delito, Rafael Furcal tuvo que pasarse 21 días en prisión en el invierno de 2004 y el prometedor lanzador de los Mellizos de Minnesota, Francisco Liriano, acaba de ser detenido por el mismo caso.
Para Porfirio Veras, Comisionado Nacional de Béisbol Profesional, este tipo de conducta lesiona la industria beisbolera dominicana, ya que se envía una mala imagen a las organizaciones de las Grandes Ligas que no representa a la mayoría de jugadores.
Las gerencias de los Medias Rojas de Boston y los Orioles de Baltimore esperaban pasarse el invierno concentrado en mejorar sus escuadras, pero las exigencias de cambios de Manny Ramírez y Miguel Tejada fueron el tema que más tiempo les tomó. A ambos jugadores los atan millonarios contratos, sin embargo, por una u otra razón, ninguno se siente cómodo en el lugar en que se encuentra.
Asimismo, el contrato más grande que se ha otorgado en arbitraje correspondió a Alfonso Soriano, pero este acuerdo no fue suficiente como para que el nativo de Quisqueya aceptara de forma amigable moverse de la segunda base a los jardines.
"Eso habla mal de nuestro béisbol. Los jugadores deben entender que ellos representan a un país y su conducta debe ser intachable. Creo que deberían ser más medido", recalcó Veras.

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Escrito por - Nathanael Pérez Neró